viernes, 30 de enero de 2009

Comunicación: Séptimo día



Y después del sábado la nada en persona. Día de levantarse tarde, de desayunar a cualquier horario, de leer el diario y quizás subir a un volumen medio esa música que no podemos escuchar en la semana.


Pero ¿Qué pasa en la televisión? Es el día que menos se vende, que el espacio esta en blanco y negro, y solo nos acordamos de ella a la noche cuando, después de haber sufrido toda la tarde escuchando el partido por la radio, lo padecemos como si todavía fuera el atardecer de otra derrota de nuestro equipo sentados en el sofá de casa por tv.


¿Al mediodía? Los abuelos que nunca vemos, los tíos de las afueras de la ciudad, que nos ponen a la fuerza o algún amigo: es moneda corriente para que nadie prenda nuestra caja de sorpresas: antes los Benvenuto, feliz domingo, y hasta las películas nacionales de canal trece, parecían conservar cierto espíritu de gusto y anzuelo para los que no saben que hacer con su melancolía.

Ya es lunes, y en las oficinas, en los colegios, o en algún mensaje de texto, pocos suelen hablar, o escribir, lo vi ayer en la televisión.
Será que todavía queda la afonía por ese penal mal cobrado, o por el gol agónico de nuestro equipo. ¿Será?

Inventemos, empecemos a crear domingos en los que no importa si llueve, o si el calor nos agobia, o si nos da esa tristeza de suicidio por que la televisión puede dar mucho más que en los restantes y desgastados seis días. O que se viva como un no-domingo!


Publicado por: AGuStíN SeNatOrE.

2 comentarios:

  1. Se viene se siente!!!! Aguante EL NO DOMINGO!!!!... lo siento, no puede resitir.. muy buen comentario.

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  2. Querido Agus, existe en Saavedra un bar llamado Anti-domingo que solo abre los domingos a la noche. Visítalo! Para el domingo 8/12 te tengo un plan, ver a Solver en el Paseo de la Costa de Vte López. Que te parece???
    Abrazo de gol
    N!co/Solver

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